Los 5 hombres que mejor besan de todo el zodiaco

Besar es la mejor terapia que existe. Con un beso, se recargan las pilas al instante. Cuando te sientes deprimida o estresada, un beso cariñoso de tu pareja te anima inmediatamente. Y no estamos hablando de un sencillo pico, sino de una romántica sesión de besos, de esas que hacen que tu corazón se acelere y que son la puerta de entrada a apasionados encuentros.

No todo el mundo besa igual de bien. Unos son grandes besadores y otros no tanto. Por supuesto, la experiencia influye mucho, pero ¿sabías que algunas personas nacen con una habilidad especial para besar? Tu fecha de nacimiento puede ser determinante en este aspecto y si perteneces a uno de estos signos, quiere decir que dominas este arte por completo.

Aries

Salvaje y atrevido, Aries suele iniciar el primer beso y conoce bien el arte. Es su confianza en sí mismo y su carácter experimental lo que hace que sus besos sean tan buenos. Siempre te sorprenderá con las nuevas técnicas que aportan.

Cáncer

Cuando se trata de ser romántico, no hay nadie mejor que un canceriano. Besarle no será una experiencia aleatoria, sino que llenará tu estómago de mariposas. Cáncer derramará todo su afecto en ti y con cada pequeño movimiento de sus labios, sentirás que te acercas a su alma. Te besarán y al mismo tiempo, acariciarán tu cara y tu pelo. Es difícil no enamorarse después del primer beso.

Piscis

Si hay algún signo del zodíaco a quien le guste satisfacer a su pareja, se trata sin duda del abnegado Piscis. La razón por la que besa tan bien es que llega a comprender muy bien a su pareja. Sabe qué tipo de beso le hará flaquear y lo utiliza para seducirla de una manera magnífica.

Tauro

El problema con Tauro es que le gustan más los juegos previos y los besos que el sexo en sí. Tauro pondrá todo lo que tiene a la hora de besar a su pareja y lo hará de la forma más romántica posible. Es un signo cálido y juguetón, por lo que besar a Tauro es algo increíblemente sexy y agradable.

Leo

Besar a un Leo es una auténtica experiencia. No estás besando a una rana, sino a un príncipe. Sus besos son salvajes y apasionados y puede ponerte tan caliente con un solo beso que es bastante improbable que las cosas terminen ahí.